Buenos días artistas. Ya estamos a viernes y el fin de semana lo rozamos ya con los dedos. A disfrutarlo como más nos apetezca. Además toca Oscars, y este año voy a verlos (o escucharlos) en directo, que hace mucho tiempo que no lo hago. Eso sí, de hace unos años a esta parte mis compañeros de la facultad, como buenos comunicadores audiovisuales hacen la pertinente porra de los ganadores, y este año no tengo clara ni una sola categoría. Bueno, la de mejor director más o menos, y me duele en el alma mi elección. Este año me he pimplado ya 6 películas de las que van a los Oscar (estoy convenciendo a mi chico para ver esta noche la séptima, pero veo la cosa difícil). La última fue el miércoles,
Doce años de esclavitud, y... ¡puf! A ver, no es que sea dura, es tan trágica que no deja respirar, y terminas por salir de la historia (al menos yo tuve que desvincularme). Cada plano (muchos de ellos muy largos, cargantemente largos, me recordaba a
Muerte en Venecia) de la película es dramático, hasta el punto de hacer la película casi plana. SPOILER>>>
Hasta el final feliz y esperado es trágico. <<<SPOILER. Pero lo dejo aquí, porque como me lean mis compis de la universidad me van a dejar de hablar, y como sabéis, para gustos los colores.
Y hablando de los Oscar os voy a hablar de una de las chicas de moda, de
Jennifer Lawrence que se convirtió en la nueva
Miss Dior, desbancado a
Natalie Portman. Me encanta
Jennifer Lawrence, en todas sus facetas, pero reconozco que
Natalie Portman me convencía como
Miss Dior, tan dulce... Lawrence es fresca, divertida y espontánea, no creo que la dulzura sea una de sus facetas más explotadas (y creo que por eso me gusta tanto).
Dior quiere llegar al público más joven por lo visto.