Aunque no lo hago a menudo, el de hoy es un post de esos off topic, de los que nada tienen que ver con la cosmética (aunque os traigo un poquito de cosmética). Y creo que os va a gustar. Por otro lado es algo de lo que tenía muchas ganas de hablaros, y dado que hoy es el Día de la Tierra, me ha parecido un momento fantástico para daros 5 tips muy sencillos para reducir el consumo de plástico, cambiando muy poquito algunos actos cotidianos.
Según Wikipedia, el Día de la Tierra es un día celebrado en muchos países el 22 de abril. Su promotor fue el senador estadounidense Gaylord Nelson, quien instauró este día para crear una conciencia común a los problemas de la sobrepoblación, la producción de contaminación, la conservación de la biodiversidad y otras preocupaciones ambientales para proteger la Tierra. Es un día para rendir homenaje a nuestro planeta y reconocer a la Tierra como nuestro hogar...
Está muy claro que el ser humano no trata muy bien el planeta en el que vive, ni siente demasiado respeto por las criaturas con las que comparte el mundo. Hemos visto desaparecer ecosistemas enteros (los arrecifes de corales tienen los días contados), hemos visto extinguirse especies (la última creo que ha sido el rinoceronte blanco del sur), somos testigos de como los polos se derriten, de como el clima cambia... y ante estas catástrofes nos limitamos a fruncir el ceño, sentir una punzada de lástima y seguir con nuestras cómodas vidas. Porque ante todo nos gusta que esa cómoda, y se nos ha ido de las manos. Pensamos que con reciclar es suficiente, que ya hemos hecho lo poco que podemos hacer por el planeta en el que vivimos con tirar un poco de papel a contenedor azul y separar lo del amarillo de todo lo demás tenemos la cuota cubierta, mientras abusamos del coche y consumimos de forma desmedida productos de usar y tirar que a lo único que benefician es a nuestra comodidad. Y no es solo reciclar, también hay que empezar a reducir YA.
No quiero ser cínica, al fin y al cabo yo pertenezco a esta sociedad y participo de su forma de consumo, pero no os voy a engañar, en los últimos meses he ido poco a poco tomando más y más conciencia, y he cambiado algunas cosas en mis hábitos domésticos que no me han restado calidad de vida y que, si todos lleváramos a cabo estaríamos haciendo algo muy bueno por la Tierra: reducir el consumo de plástico. Porque lo del consumo de plástico se nos ha ido de las manos, y en 2050 Artistas, habrá más plástico que peces en el mar, y esta afirmación nos debería hacer reflexionar mucho y profundamente.
No he llegado al nivel de esos héroes locos que han apostado por una vida de residuo 0 en casa, aunque me encantaría aspirar a ello, es algo que requiere de una logística bien planificada, y un cambio en las costumbres diarias bastante profundo. Se puede lograr pero poco a poco, o de lo contrario puede crear el efecto contrario, un rechazo (es una opinión nada más), por eso os quería traer hoy 5 tips muy sencillitos para reducir el consumo de plástico.
Bolsas de tela.
El más fácil de llevar a cabo y que seguro que muchas y muchos ya lo tenéis más o menos interiorizado es utilizar bolsas de tela. Incluso los grandes supermercados (Mercadona, Carrefour, Lidl...) ya ofrecen sus propias bolsas para usar una y otra vez, que están muy bien, son de loneta, grandes y robustas, muy fuerte. Pero no nos limitemos a las bolsas de tela para hacer la compra que nos llena la nevera. Es muy sencillo llevar una bolsa de tela en el bolso por si en algún momento tenemos que comprar cualquier otra cosa evitar que nos den una bolsa de plástico: su vida media útil es de 12 minutos y tarda en descomponerse hasta 500 años (aquí la fuente, hay un descargable muy interesante por cierto). Por suerte parece que las leyes van a favorecer su desaparición, así que cuanto antes aprendamos a llevar bolsas de tela mejor. Además hay algunas realmente chulas, yo hace tiempo que les tengo echadas el ojo a esta, a esta , a esta y a esta, todas ellas de temática feminista.
Bolsas reutilizables para comprar frutas, verduras... a granel.
En la línea de lo anterior, quiero presentaros una de mis últimas incorporaciones en mi cesta de la compra, y que no deja a ninguna cajera, ni de Lidl ni de Mercadona indiferente. Ojalá pudiera comprarlo absolutamente todo a granel y en tiendas pequeñas, pero vivir en el extrarradio de una gran ciudad en barrios de reciente construcción hace que la oferta de tiendas sea más bien limitada, y muchas veces con suerte lo único que queda a mano es un supermercado de una gran cadena. Además este tipo de establecimiento, o bien envasan la fruta y la verdura de una forma absurdamente innecesaria (echad un vistado al movimiento "Desnuda la fruta" para saber de lo que hablo) o bien ofrecen cosas a granel siguiendo aquella premisa de "sírvase usted mismo" a base de bolsas de plástico. Ya hace tiempo que para llevarme una berenjena o una calabaza optaba por llevármela al desnudo, ella solita sin bolsa, y al llegar a casa la limpiaba bien limpia y listo, pero claro, para medio kilo de mandarinas, o de nueces, o de judías, esta táctica no me valía.
Una amiga mía se hizo bolsas con telas viejas y en tiendas pequeñas de a granel no le ponen ningún impedimento para usarlas, pero no estaba yo muy segura de que a las mortales que hacemos nuestra compra en Mercadona, Lidl, Carrefour y derivados no nos fuesen a ponernos alguna pega... Hasta que me hice con las bolsas para comprar a granel que veis en la imagen (gracias Rebeca por el descubrimiento). Son muy similares a las que se utilizan para lavar la ropa interior en la lavadora, solo que se cierran con una cuerda, como si fueran un saquito. El único problema que tienen es que hay que acordarse de ellas antes de ir a la compra, por lo demás no me han puesto ningún impedimento al usarlas en los súper (más bien al contrario, me preguntan donde las he comprado). Son ligeras, se puede lavar la fruta dentro de la bolsa, se pueden meter en la lavadora, y lo más importante, se pueden usar una y otra vez. Yo las compré en Amazon, 9 bolsas por unos 10 €, os dejo aquí el enlace.
Cubiertas de silicona para frutas y verduras a medias.
Otra cosa que me escandalizaba en casa era la gran cantidad de film transparente que usábamos en la cocina. Somos dos, a veces yo sola para comer, y muchas veces no uso una hortaliza al completo, lo que hacía que después lo envolviera en papel transparente: el típico medio limón, la típica media cebolla, la berenjena a medias, el tomate gigante de la huerta de mi tío... me entendéis ¿verdad? Hasta que la odiosa publicidad de Instagram me mostró unas cubiertas de silicona para frutas y verdura.
Decidme si no son ideales... Los hay de varios tamaños y se ajustan bastante bien a las frutas y las verduras. Se pueden reutilizar, meter en el lavavajillas y desde que los tengo prácticamente no uso film. También compré dos juegos de 4 en diferentes tamaños en Amazon por unos 5 € cada uno, en este enlace.
Y cuando los moldes no se ajustan (me ocurre con el queso o con los pimientos) opto por utilizar o bien tuppers (no son lo ideal, no dejan de ser plástico y no son inocuos para nuestra salud, pero mientras los tenga y sean operativos les seguiré dado uso), o bien tarros de cristal, todavía mejor, y espero que a la larga sustituyan por completo a los envases de plástico.
Botella reutilizable de Chilly Bottles.
También he decidido en invertir en una buena botella de agua, y de nuevo la publicidad de Instagram me hizo el lío para que me hiciera con esta de Chilly Bottles. Es fácil comprar una botella de agua cuando se tiene sed y después reciclarla (el plástico a diferencia que el cristal no se puede tiene un número limitado de veces que se puede reciclar), o reutilizar hasta límites poco saludables. No es bueno para nosotros ni tampoco es bueno para el medio ambiente, de nuevo el único beneficiario es nuestra comodidad.
La botellas de Chilly Bottles no son baratas, esta de medio litro me costó 30 €, pero tiene prestaciones muy interesantes que no da ni una botella de plástico ni otras botellas reutilizable:
- Es de metal, concretamente de acero inoxidable, con lo que tiene una esperanza de vida realmente larga.
- También es un termo, mantiene la temperatura: 24 horas para frío y 12 horas para bebidas calientes, así que se puede llevar el café o el té templadito en invierno, y el agua bien fría en verano, prestaciones que una botella de plástico no da.
- Tiene un tapón hermético de rosca, que permite abrir y cerrar la botella con facilidad, sin que se salga nada y manteniendo la temperatura.
- Y además es bonita, se ajusta al estilo de vida urbano, perfecta para llevar en el bolso, o en la bolsa de deporte, o incluso de excursión a la montaña; cuenta con varios modelos diferentes y con diversos tamaños.
Seguramente la única pega que le pueda poner es que pesa bastante más que una botella de plástico, pero dadas sus prestaciones merece la pena, sin duda la recomiendo. Se compra online, tarda como una semana en llegar y no tiene gastos de envión. Os dejo aquí el enlace a la web.
Cosméticos desnudos, sin envases.
Y por último no podía faltar una mención a los cosméticos desnudos, de los que Lush es la firma que más variedad ofrece, aunque hay otras que también tiene. Champús, acondicionadores, hidratantes, jabones, exfoliantes, geles y lo último creo que fueron pintalabios. La variedad de cosméticos sin envases que tiene es amplia, y su calidad es buena. Es cierto que puede en un principio costar usar un champú en formato sólido pero es cuestión de acostumbrarse, y si además los resultados son buenos ya no hay marcha atrás. Puede que no todos los bolsillos se puedan permitir este tipo de productos para un uso diario, pero utilizarlos de forma esporádica ya supone un ahorro en el consumo de plástico.
Además tiendas como Lush, Kiehl's, o MAC si no me equivoco cuentan con campañas de recogida de envases vacíos a cambio de productos nuevos, que son también muy interesantes de cara a reciclar y concienciar.
Y estas son las medidas por las que he optado en mi día a día. Tal vez no todas sean las mejores ni las ideales, pero es un paso que me ha hecho más responsable y que me llevará a otros actos que harán ayudarán al medio ambiente. Son buenos para el planeta y también me hacen sentir bien, mejor, más feliz sí. Y sobre todo, son fáciles de llevar a cabo, solo hace falta voluntad. También he tomado medidas como sustituir cepillos de dientes de plástico por otros de bambú, voy a ir optando por utensilios de cocina de metal, madera o cristal, olvidarme de las pajitas (este vídeo os va a convencer de ello, aviso, la tortuga lo pasa muy mal), y si creéis que las necesitáis para los niños usadlas de cartón; hace ya años que opté por la copa de menstrual, cuando queráis os hablo de ella, ya no imprimo los apuntes, he optado por utilizar una app en la tablet que me permite anotarlos y subrayarlos; y en mi casa absolutamente todo lo textil que ya no se utiliza se lleva Humana, las Naps incluidas.
Y hasta aquí mi alegato de hoy. Esta vez sí que os voy a pedir algo que no he hecho nunca, y es que si os ha gustado, o el post os ha parecido útil o mínimamente interesante, compartidlo. Porque estos son actos pequeños que se pueden hacer en casa, pero las grandes revoluciones o los grandes cambios empiezan así, en las cosas cotidianas, y esta revolución nos hace falta, porque no hay un PLANeta B.
Y por supuesto, compartid vuestros tips para reducir la producción de basura y deshechos para que otras personas puedan apuntarse.
No había visto lo de las cubiertas de silicona para frutas y verduras. Buena idea !!.
ResponderEliminarBesitos
Ya ves! Les estoy dando muchísimo uso.
EliminarUn besazo!!
genial post! me has descubierto cositas que no conocía!
ResponderEliminarGracias guapa, era la idea :)
EliminarQué buen post y qué ideas tan geniales y originales, me ha encantado.
ResponderEliminarUn besito guapa :)
Ojalá podáis aplicar alguna :) Poco a poco voy haciendo más cositas para usar menos plástico.
EliminarUn beso!
Excelente entrada. Tengo la misma botella de Chilly y me parece super práctica y encima super bonita. Te voy a compiar en unos cuantos Tips que me han encantado. Muchas gracias por la info. Bss!!!
ResponderEliminarGracias guapa. Ais la botella, lo cara que es pero lo feliz que me ha hecho...
EliminarPues ya me contarás cuales llevas a cabo ¿eh?
Un beso
No conocía las bolsas reutilizables para la fruta y verdura, me ha gustado mucho la idea. bsts
ResponderEliminarY las cajeras del Mercadona se quedan locas cuando las ven ;)
EliminarMe has convencido: voy a comprarme las bolsas de la fruta y las tapas para las "medias" frutas. Gracias por estos consejos tan útiles, y por las reflexiones de las que los has acompañado.
ResponderEliminarHertally's Makeup ~
Aaaah que bien! Ya me contarás qué tal te va con ellas.
EliminarGracias a ti por leer mi post, me alegra mucho que os guste y que os sea útil.
todo lo que sea reducir el consumo de plástico es fantástico; yo por ejemplo siempre trato de usar productos de limpieza con Etiqueta Ecolabel, pues son productos de limpieza que se pueden clasificar de Ecológicos ya que usan para fabricar sus envases plásticos reciclados. La parte digna de mención es que esta etiqueta Ecolabel la proporciona la Unión Europea (UE) y no es fácil de que te la den. Así y de esa manera te garantizas de que estás realmente contribuyendo a reducir el consumo de plástico.
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