Davines: champú y mascarilla de la gama Renewing >> PE-LA-ZO

Sabéis que soy muy muy fiel a mi champú, lo sabéis, y no soy muy dada a probar otros champús salvo que me den buen feeling. Cuando la gente de comunicación de Davines me habló de la marca me dijeron que iba a alucinar, que realmente quedaría encantada con ella y que era lo más entre las bloggers de no sé donde y alguna que otra celebrity. No dudé que la marca fuera estupenda, pero de ahí a que me dejase aluciflipando... Pero sí, he alucinado hasta el punto de que el champú se coló en mis Favoritos de Agosto. Hoy voy a hablaros de el champú y la mascarilla de la Gama Renewing, el último lanzamiento de la marca.

Ya os comentaba en mi anterior post, cuando os hablé de Nabla que la cosmética italiana estaba más presente entre nosotros de lo que parece. Davines es precisamente una marca también italiana, especializada en productos para el cabello que apuesta por utilizar en sus formulaciones altos porcentajes de ingredientes naturales, por envases biodegradables, y usando en su trabajo energía renovable. Hasta ahora van ganando a puntos. 

Hay que añadir unos diseños sencillos pero rompedores. ¿A quién se le habría ocurrido poner tortugas en un envase de champú que no esté dirigido a un público infantil? A mí por ahí también me han conquistado. 

Por cierto el dibujo cambia en función de la gama, y esta, Renewing, está formulada para aportar bienestar al cabello, y para tratar su envejecimiento de forma preventiva. Además ayuda a reparar la salud del cuero cabelludo y aportar fortaleza al cabello, incrementando su brillo (sí, deja brillaco), hidratación (sí, es muy hidratante)  y en general a dejar el cabello en óptimas condiciones. 

La gama cuenta con un champú, una mascarilla, un exfoliante del cuero cabelludo, y un sérum. Yo he probado los dos primeros.

El champú de la gama Renewing de Dávines simplemente me ha encantado. Es perfecto para cuando quiero descansar de mis queridos champús sólidos repletos de sulfatos y dejar descansar a mi cuero cabelludo. Este es un champú increíblemente suave, pero no por ello deja de ser efectivo: deja el pelo limpio, muy muy hidratado, suave, e increíblemente suelto, sin necesidad de usar acondicionadores ni ningún otro producto. Una gozada. A pesar de no llevar sulfatos las locas de la espuma podemos estar tranquilas porque genera bastante, y además sin necesidad de utilizar grandes cantidades de champú (lo estuve usando en verano cuando tenía el pelo muy  largo). Además el cabello dura limpio bastantes días. Me ha encantado. Su aroma no es nada especial, huele a champú, a limpio, sin pretensión alguna. Es de color miel y su textura es fluida, sin ser líquida.

La mascarilla me ha gustado, pero no tanto como el champú. Está indicada para todo tipo de cabellos pero a la hora de usarla hay que tener en cuenta el tipo de cabello que se tiene para aplicarla antes o después del champú: por ejemplo, en cabellos finos como el mío la marca recomienda utilizar la mascarilla antes del champú, para no aportarla excesivo peso. Si no lo habéis hecho nunca y tenéis el pelo fino o graso probad a invertir el orden: os beneficias de las cualidades de las mascarillas sin aportar grasa o restarle volumen al pelo. Se aplica donde se quiera tratar el cabello, se deja actuar entre 3 y 5 minutos y se aclara.

No obstante esta es una mascarilla potente, densa y muy hidratante. Es genial para recuperar un cabello machacado, pero para uso frecuente si no se tiene el pelo demasiado seco puede resultar excesiva. Me gusta usarla una vez al mes como cura de hidratación pero nada más. También se puede usar para recuperar la salud de la piel del cuero cabelludo, pero para este fin os confieso que no me he atrevido a usarla, ya que temo que pueda comprometer el volumen.

Para conseguir estos resultados tan estupendos la fórmula, libre de parabenos y sulfatos, cuenta con un complejo llamado Hair Longevity Complex, con una combinación de tres ingredientes estrella que ayudan a luchar contra el proceso de envejecimiento e inflamación:

• Extracto de bayas de Maqui: Súper fruto de color violeta que debe su coloración a un pigmento llamado antocianina, responsable del gran poder antioxidante de las bayas.

• Extracto de espinaca: rico en vitaminas y minerales,  para conservar el cuero cabelludo y el cabello sanos, que bloquean el proceso de glicación gracias a la vitamina B9 (ácido fólico), la cual contribuye a una correcta metilación.

• Carnosina: De gran poder anti-glicación, es de gran ayuda para las células gracias a su acción preventiva del envejecimiento provocado por el estrés oxidativo y la inflamación.

Como veis son completos, una apuesta fantástica para quienes deseen cuidar o recuperar el cabello apostando por productos efectivos y con un importante sentido ético que es sin duda un valor añadido. En cuanto a precio, el champú tiene un precio de 21,10 € el formato de 250 ml  y la mascarilla cuesta 26,70 € por 250 ml. Ambos tienen también un formato de 100 ml más económico, para viajar o si para, como he indicado más arriba, se quiere hacer un uso más puntual de los productos.