How 'bout them Apples? de The Blam: una auténtica todoterreno.

Como ya he dicho varias veces últimamente, me está dando por los coloretes y los labiales. Antes era de cargar bastante el maquillaje de ojos, ahora lo hago esporádicamente, y apuesto por unos labios con color y unas mejillas iluminadas y con un aspecto de buena cara que hace que me vea estupenda. ¡Am! y máscara de pestañas, mi gran olvidada de toda la vida y sin la que últimamente ya no salgo (será que las Beauty Boxes han insistido tanto en enviarme máscaras de todo tipo que de tanto verlas por casa no me ha quedado más remedio que utilizarlas). Y uno de los productos a los que me estoy dando desde hace más o menos un año es a los tientes de labios y mejillas, sobre todo porque con ellos se consigue un aspecto muy natural y de buena cara que a todas nos encanta, desde los típicos tints de Benefit, pasando por Stainiac de The Blam y aterrizando en los que son de textura crema. Así que cuando el mes pasado probé la minitalla de How 'bout them Apples? de The Balm que recibimos el mes pasado con Birchbox (por cierto este mes hemos recibido otro producto similar), no pude evitar hacerme con la versión completa de seis colores.

La paleta lleva en mi poder casi un mes, pero el día que la compré una de mis Instagram-seguidoras me dijo que le había decepcionado porque no aguantaba en la piel, y que si eran tan de larga duración como los Instain también de The Balm. Por un lado quería comprobar si realmente duraban o no en la piel. En cuanto a lo segundo, no es comparable a los Instain, porque la pigmentación de los coloretes  Instain es incluso exagerada (como yo os había comentado yo tuve que pedir ayuda para aprender a aplicarlo, y aún así voy con cuidado). Instain son además coloretes en polvo, y estos son en crema. Y aún así puedo decir que en las mejillas aguantan horas (perdiendo un poco de intensidad pero no por ello quedan menos bonitos). Además a pesar de ser en crema no dejan sensación grasa en la piel, y el acabado de casi todos ellos es bien mate. En los labios es otro cantar: quedan bonitos y discretos, suaves, pero aguantan poquito. Es recomendable utilizarlos acompañados de un bálsamo de labios, aplicado previamente, ya que resecan un poco los labios. Con el bálsamo conseguimos además de hidratar los labios, que el color aguante un poco más. 

Su uso es sencillo, yo lo utilizo directamente con los dedos (en los labios con un pincelito para controlarlo mejor), sobre las mejillas. Es totalmente modulable así que si nos pasamos con el producto basta con dar unos toquecitos y el color se rebaja, sencillo y cuestión de cogerle el truco. 

En cuanto a los colores a primera vista seguro que alguna identifica algún color que no usaría en la vida. Sin embargo os aseguro que todos son muy utilizables: 

• Cider: Un tono muy nude y muy suave, más marrón que rosa pero muy suave. En los labios quizá me convence menos pero es una cuestión de gustos.
• Cobbler: Rojo, muy muy pigmentante. Asusta un poco utilizarlo en las mejillas pero bien difuminado queda muy bonito y saludable. Es el más similar al Benetint o al Sainiac.
• Pie: No es exactamente coral pero se le acerca mucho, tiene un toque rojizo muy bonito. En las mejillas queda muy natural, pero hay que extenderlo y aplicarlo a conciencia porque tiene bastante pigmento. 
• Crisp: Coral con brillo dorado, su textura es un poco menos fluida que el del resto de los colores, un poco más seca, y el único que tiene acabado brillante, con ese toque de shimmer dorado muy fino y muy discreto en la piel, pero muy bonito. Su uso quizá sea un poco más complicado en los labios por el tema del brillo, pero aún así queda bonito. Puede recordar un poco al Rose Gold de Sleek (del que o hablé hace unos días) pero con un shimmer más fino y discreto; o al Orgasm de The Nars.
• Candy: Rosa brillante. Uno de los que a primera vista menos me gustaba para mí pero en la piel tiene un no sé que melocotón que hace que no quede tan chillón como esperaba. Da un aspecto muy fresco al rostro.
• Caramel: Marrón con una tendencia un poco rosada en la piel pero que da un toque bronceado natural y muy bonito. 

Al final se le da uso a toda la paleta, creedme, está carga de matices y es ideal para utilizar a diario porque da un toque muy natural y muy fresco al rostro, una todoterreno. Incluso se puede utilizar en párpados por lo que he podido leer por ahí. Se cierra facilmente, el envase está imantado, y tiene un espejo bien hermoso. Además al ser tan plana es genial para llevar en el bolso, sin miedo a que se derrita (comprabado: coche negro aparcado todo un domingo en Ciudad Real al sol. La paleta de The Balm absolutamente intacta; no puedo decir lo mismo de las barritas de masaje o el sérum de Lush metidos en su lata que se me echaron totalmente a perder). 

En cuanto al packaging bueno, no pasa desapercibido. Cada color representa una manzana (por eso del aspecto sano como una manzana), acompañado de un chico estupendo y vestido de Cowboy. El por qué de esto y del nombre de la paleta se me escapa un poco de mi entendimiento. 

Y su precio es estupendo: cuesta unos 25 € y podéis encontrarla Online (tienda Birchbox, Maquillalia -rebaja por cierto-...) o en tiendas Primor. Decidme si no es una auténtica delicia... 100% recomendable.

¿Qué os parece? 

GRACIAS A TODAS POR LEER Y POR VUESTROS COMENTARIOS.

PASAD UNA FELIZ SEMANA.